24 ene 2009

B, la primera letra.


Abusando de la magnífica perspectiva que me ofrece la ubicación geográfica donde resido y a propósito de la conmemoración de las bodas de plata poligámicas con mis cotizaciones sociales y el sector vitivinícola, quiero compartir experiencia y sensaciones desde este medio tan útil para satisfacer la ansiedad que emana de la pasión incontrolable de conocer vinos, tierras y personas.

No sé hasta que punto, las influencias culturales del medio social agrario del que procedo han conformado mi carácter. Si sé que vivir en el entorno elegido, siempre en busca de la conciliación personal y laboral, me resulta un reto permanente.
Harto ya de la desmoralizante comparación, tan cierta de que "vender vino en La Rioja es como vender hielo en el polo", seguiré tratando de encontrar los recursos necesarios para el sustento dentro de esta actividad, sin tener que vender mi alma al diablo. No sé si sé lo que quiero, pero sí lo que no.

En esta era de sobreinformación, cualquiera sabe lo que decimos de las cosas, de las personas, de los acontecimientos, etc. Un buen sitema interno, espontáneo y autogenerable, nos permite cribar la información y adaptarla a nuestros propios mundos. Aunque si se quiere conocer en profundidad se precisa un esfuerzo que no todo el mundo está dispuesto a realizar. Con esta fuerza de profundidad a la esencia, surgen la armonía y el placer durante la inestable y eventual trayectoria de la vida.

Sirva esta pseudo presentación y cuasi declaración de intenciones para no presentar a Basilio Izquierdo. Tiempo habrá.
En una bodeguita de Laguardia, parte de los edificios que conformaron aquella cooperativa El Collado, donde un grupo de vinicultores compartían útiles y recursos para elaborar sus vinos con autonomía, disfruta Basilio. Bueno ahí y buscando viñedos con los que interpretar desde su interesante perpectiva.

B de Basilio, no es el primer vino que elabora. El hombre lleva ya tiempo en simbiosis con las cepas, los suelos, los vinos y las gentes.
Para elaborar este vino, Basilio eligió un viñedo de San Vicente, en el pago de Gallocanta.
"Uvas de grandes vides de garnacha blanca y viura que mediante una prensada suave pasó el mosto a fermentar en barrica borgoñona. El batonnage sobre lías durante seis meses ha completado el redondeo del vino", dice en la etiqueta.
Abro la botella sin sacacorchos, mientras me explica que la botella y el tapón de cristal hermético y reutilizable, tienen un coste elevado, pero ... que es lo que ha elegido para este vino. A la vez nos hacemos preguntas sin respuestas sobre la influencia de ese tipo de cierre sobre la evolución del vino en botella.
Dos acercamientos y un trago. La situación me obliga a opinar.
-Brillante amarillo pálido. Alta intensidad aromática. Perfecto equilibrio entre la acidez y los 13º que indica la etiqueta. Y el volúmen del trago, natural, sin escesos, como a mí me gustan. ¿Y la barrica borgoñona?
- Todavía busco un poco mas de volúmen. Y en cuanto a la madera, dice que "la perfección llega cuando una ensalza al otro".
Luego hablamos de proyectos, de pagos, de tranquilos y hasta de espumosos blancs de noir, etc.
Feliznavidad.


Juan Carlos Somalo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Olaf dijo...

Vaya, que me tenga que enterar por el google que tienes blog...
Pues nada, apuntamos las coordenadas del sitio y estaremos atentos a ver que nos cuentas.

Ganas tengo de probar estos vinos de Basilio de los que tan bien he oido hablar.
Saludos

Olaf

www.ino dijo...

Pues bienvenido. Una pena que no haya dado con las canillas uesebé para poder compartir unos vinitos.
Que esto,a palo seco, resulta un poco sinsustancia.

Lo de Basilio, a ver si lo consigo resumir, pero es que el hombre es una caja de sorpresas y un torbellino repleto de conocimientos y experiencia.
Esta tarde, subimos a su casa de Haro a degollar unos espumosos de hondarrabi zuri que lleva elaborando desde hace unos años ahí arriba, en la Txakolina.
En la mochila llevo un par de champagnes muy interesantes (en todos los aspectos, que me he traido de la Francia.
A ver si saco un rato y lo cuento que estoy sólo en el trabajo.
Saludos,